El incienso como ya sabemos, tiene múltiples usos, pero en el mundo del reiki es una herramienta indispensable en los tratamientos. El humo, que desprenden las sustancias que componen el incienso al ser quemadas, logra dos objetivos muy útiles en este tipo de sanación energética:

Por un lado hace que la mente, tanto del paciente como del terapeuta, se concentre mucho más en el acto de sanación.

Por otro lado, el incienso ayuda a mover la energía, elevando la vibración del terapeuta, con lo cual, éste puede captar más energía de alta frecuencia, así como también ayuda al paciente a mover su campo áurico, por lo que acepta mejor la energía de alta frecuencia que el terapeuta está introduciendo en su campo áurico y le ayuda a expulsar la energía mal calificada que tiene incrustada en su aura.

Por último, mantiene en moviendo toda la energía del lugar donde se hace Reiki, ayudando con esto a mantener “limpio” el lugar donde se realizan las terapias de sanación.

Como puedes ver, el incienso toma un papel muy importante en el Reiki, por lo que el terapeuta debe asegurarse que el incienso que compra sea de buena calidad, si es un incienso malo su utilidad mágica disminuye, porque no sabremos cómo afectan dichas sustancias al aura o sustancia astral que queremos afectar.

Nosotros recomendamos ampliamente la línea de incienso de masala, estos inciensos dan muy buenos resultados en las terapias y además, les agradan a casi todo el mundo. De todas formas, si preferimos comprar algún otro aroma, los que son peculiarmente útiles para la sanación son: rosa, romero, incienso puro y sándalo.