Aunque los mantras ya establecidos están conformados a menudo por palabras con un significado ya otorgado, es importante que en la práctica no nos detengamos a racionalizar su significado, pues va en contra de la esencia de los mantras, que es despejar la mente de cualquier pensamiento.
En ceremonias hindúes, a veces se trabaja con mapalas o malas que son accesorios similares a un rosario, que tienen 108 bolitas (algunas veces 21) para recitar este número de veces el mantra escogido. Muchos de quienes practican disciplinadamente con mantras siguen esta tradición y trabajan con mapalas en sus ratos de meditación, usualmente en la mañana y tarde. Es frecuente encontrar la práctica de mantras en ciclos de 3 o múltiplos de 3, hasta 108.
Sin embargo para usar mantras no es necesario establecer una ceremonia específica. De hecho, usar los mantras como instrumento de relajación y meditación es bastante fácil. El simple hecho de repetir un mantra (en voz alta o en la mente), en cualquier momento que se necesite, lo hace efectivo. Puede ser en el bus, en una reunión o mientras caminamos nuestro perro. En cualquier momento donde necesitemos despejar la mente de preocupaciones, problemas o pensamientos negativos, o invocar la solución a alguna situación, usar mantras será efectivo.
Para crear un estado de relajación y calma, podemos usar ritmos más lentos, mientras que si necesitamos energizarnos, podemos recitar el mantra a un ritmo más veloz y juguetón.
Ejercicio para comenzar a usar Mantras:
- Siéntese en un lugar donde no será interrumpido por al menos media hora.
- Escoja el mantra de su preferencia o empiece con un Om.
- Identifique la intención de la meditación y el uso del mantra.
- Siga los pasos para meditar. Concéntrese en su respiración por 5 minutos, siguiendo el ritmo natural del cuerpo.
- Empiece a vocalizar el mantra, tomando aire lentamente y pronunciando el sonido al exhalar, prolongándolo lo que más pueda. No lo fuerce. Repita a su propio ritmo, intentando no dejar momentos de silencio entre un mantra y el siguiente.
- Siga el ritmo natural de su respiración sin quedar sin aliento. Cuando sienta que la transición es natural y sin esfuerzo, vaya bajando la voz hasta que el canto del mantra sea interno.
- Deje que el canto interno vaya bajando de volumen también hasta encontrarse con silencio.
- Disfrute de este silencio por el tiempo que desee.